- Los berrinches son frecuentes. Las rabietas, tanto en público como en casa, son la señal más segura de que un niño está mimado.
- Nunca está satisfecho con nada. Los niños consentidos a menudo no pueden expresar su satisfacción con lo que tienen. Si ven a alguien más con algo, ellos van a querer eso en lugar de lo que ya tienen.
- No ayuda en casa. A ningún niño le gusta limpiar, pero una vez que han pasado los primeros años de vida, debería estar dispuesto a ayudar con tareas pequeñas, como recogiendo sus juguetes y guardando sus zapatos.
- Intenta controlar a los adultos. Los niños mimados no diferencian entre sus iguales y los adultos, y esperan de ambos que les escuchen en todo momento.
- Te avergüenza de forma frecuente en público. Que tu hijo se equivoque de vez en cuando es normal, pero la situación va más allá de un hecho aislado cuando te avergüenza a propósito en público para llamar la atención.
- No comparte. Compartir es un concepto muy difícil de aprender y dominar para los niños, pero una vez que cumple 4 años, deberían estar más dispuestos a compartir sus cosas con sus amigos y hermanos.
- Tienes que rogarle. Los padres o tutores son figuras de autoridad y los niños deberían obedecer cuando realizan una solicitud. Como padres no tendríamos que rogar a nuestros hijos para que terminen de realizar una tarea.
- Te ignora. A ningún niño le gusta escuchar la palabra “no”, pero no debería ignorarte cuando hablas con él.
- No juega solo. Sobre los 4 años, un niño debe poder y estar dispuesto a jugar por su cuenta durante un tiempo. Que necesite a un padre o un compañero de juegos para jugar demuestra su necesidad de atención.
- Tienes que sobornarlo. No deberíamos tener que sobornar a nuestros hijos con dinero, golosinas o juguetes para que hagan las tareas diarias.
jueves, 26 de junio de 2014
10 señales que indican que tu hijo está malcriado
Etiquetas:
Educación,
Hijos y padres,
Niños
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3 comentarios:
La verdad es que en mi opinión hoy en día hay mucho malcriado, solo hay que ver la cantidad de padres desatendiendo a sus hijos en parques, bares y demás sitios. Menuda generación nos viene y lo sé por mis sobrinos.
Estoy de acuerdo contigo, algunos padres tienen hijos como si fueran perros y no puede ser. Al final los acaban educando los padres o un/una canguro que se queda con ellos...es una pena.
Pues sí, puede que un niño esté malcriado con lo que describes (aunque discrepo en algunas cosas), pero creo que la causa es que sus padres (o cuidadores) no han atendido sus necesidades más básicas (no sólo físicas, sino sobre todo emocionales) durante sus primeros años de vida, y por eso arrastran esa necesidad de "llamar la atención". Y a veces los adultos queremos que los niños se comporten como adultos antes de tiempo: la infancia de los seres humanos es muy larga y durante toda ella los niños deben portarse como lo que son, niños. Cuando un niño se porta mal, es porque a él no lo han tratado bien, o al menos no le han dado lo que necesita. Un niño feliz no se porta mal, aunque se puede equivocar, y muchas veces, porque está aprendiendo a vivir. A veces les exigimos a los niños demasiadas cosas...
Mª Angeles.
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