Aquí os dejo este artículo interesante hablando de los deberes y del famoso anuncio de IKEA de los deberes:
El otro día por la noche veía, una vez más, a eso de las nueve, ese anuncio de
IKEA que culpa a los deberes de la disminución de las cenas en familia en España. De entrada no iba a hacerle mucho caso, pero claro, además de editora de Decoesfera también soy profesora de secundaria y me dio por reflexionar...
Creo que el de la educación es un tema complejo sobre el que
últimamente se está frivolizando, en muchos casos, sin conocimiento de
causa y sin recurrir al análisis de expertos. No sabría decir si
el anuncio me parece oportunista o inoportuno,
coincidiendo precisamente con el mes de huelga de deberes. Tal vez el
problema está precisamente en el momento, pero hay como mínimo 7
razones por las que lo considero inadecuado y que paso a resumir
brevemente.
- Lo primero que no se está teniendo en cuenta, y que es fundamental, es la distinción entre las diferentes etapas educativas.
No pueden ser iguales los deberes en educación infantil, primaria,
secundaria o bachillerato. De ahí que una oposición generalizada a los
deberes resulte totalmente absurda. Lo lógico es que el tiempo de
deberes se incremente a medida que aumenta el nivel y si algún padre o
madre considera que los de su hijo o su hija no son adecuados para su
edad y curso, lo que debe hacer es
amotinarse montando una huelga durante la cena hablar con el tutor o la tutora correspondiente.
- Los profesores y profesoras tienen, tenemos, que cumplir la ley de educación en vigor,
la famosa LOMCE recoge: los objetivos, los contenidos, los criterios y
los estándares de aprendizaje que hay que evaluar en cada materia a lo
largo del curso escolar. En educación secundaria y bachillerato puede
haber más estándares de aprendizaje en la ley que sesiones tiene la
materia en el curso, es decir, el profesor no hace en clase lo que
quiere, hace lo que indica la ley y tiene que cumplir con el temario que
marca el curriculum
bastante más largo que el catálogo de IKEA en tiempo y forma.
- Fundamental también es tener en cuenta que uno de los pilares fundamentales de la educación es la atención a la diversidad.
Generalizar no es posible en educación, todos los alumnos y alumnas son
diferentes y tienen necesidades distintas, algunos de ellos necesidades
de atención educativa muy especiales. Nunca veo en ese anuncio de IKEA,
en el vídeo bajo estas líneas, niños o niñas con síndrome de Asperger o
de Down, o en silla de ruedas o ciegos... pero en las aulas los hay.
Las clases duran 50 minutos y en muchas ocasiones hay más de 30 niños y
niñas, ni dos minutos tenemos por alumno o alumna. Físicamente, por
mucho que los profesores y profesoras lo intentamos, es imposible
realizar todas las tareas de forma personalizada e individualizada.
- No todos los centros educativos tienen los mismos medios y recursos
y no, no todos los niños y niñas tienen en su casa una tablet con
conexión a internet. Es muy bonito hablar de un centro educativo ideal
en el que hay un portátil por alumno o alumna con una velocidad de
navegación fantástica
y muchos unicornios de colores, pero
esa no es la realidad. ¡Ojalá! Se hace lo que se puede y aunque, como en
todos los sectores, hay gente que se implica más y otra que se implica
menos, lo habitual es que el profesorado desee y busque cada día lo
mejor para su alumnado y si propone algunas actividades, muchas veces
voluntarias, para complementar el trabajo del aula en casa, os aseguro
que no es por fastidiar.
- Atravesamos, además, una situación de transición complicada en materia de educación con una ley recién implantada cuestionada por la mayor parte de la comunidad educativa y los políticos ya
tirándose los trastos a la cabeza
en la búsqueda de un pacto para una nueva ley. Hay profesorado en
activo que ha trabajado con cinco leyes de educación diferentes y que
probablemente llegue a tener que trabajar con una sexta. Leyes de
educación en cuya elaboración, raras veces se tiene en cuenta la opinión
de la comunidad educativa y las necesidades reales de los centros y el
alumnado. Toda la comunidad educativa, en realidad, es víctima de la
lucha de poder política en la que los partidos han convertido el tema de
la educación y sobre la que resulta casi imposible construir algo
sólido.
- Zapatero a tus zapatos, sois muy buenos haciendo muebles, pero no os dedicáis a educar.
Es muy fácil hablar del trabajo del profesor o la profesora cuando no
te has leído ninguna ley de educación, nunca has estado en un aula, no
has conocido de cerca las diferentes circunstancias en las que vive el
alumnado y no vives las distintas situaciones que se dan en cada centro
educativo en el día a día. Que una firma como IKEA apoye implícitamente
con su publicidad la huelga de deberes convocada por algunos padres y
madres en este mes, cuestionando la labor del profesorado, me parece
un juego muy peligroso
un tanto imprudente. ¿Qué pasaría si IKEA hiciese un anuncio
antivacunas, cuestionando la labor de los profesionales de la sanidad,
porque no nos gusta tener tantos pinchazos? Pensadlo...
- Y añadir además, porque fue lo primero que pensé ayer por la noche al ver el anuncio, que hay muchas tiendas, como IKEA, que cierran sus puertas cada día a las 22h en España,
ayer el anuncio se emitía varias veces antes de esa hora. Obviamente a
las diez de la noche los niños y las niñas ya tendrían que haber cenado,
así que antes de echarle la culpa a los deberes de que haya pocas cenas
en familia, revisemos, por ejemplo y entre otras muchas cosas, los
horarios de trabajo de sus papás y de sus mamás.
Ya para terminar decir que, en mi opinión, hay un
error de base en la interpretación de los deberes por parte de muchos padres y madres.
La idea no es que el alumnado los haga perfectos y mucho menos que sean
los padres y madres quienes los hagan. Se trata de que los alumnos y
alumnas intenten por sí mismos resolver las actividades, después en el
aula veremos qué salió bien, qué es lo que no, qué objetivos podemos dar
ya por alcanzados y para cuáles tenemos que seguir trabajando.
Y aún podría seguir dando más razones por las que esta campaña de
IKEA no me parece muy bien enfocada, hay niños y niñas que no tienen
familia, también los hay que no tienen gran cosa para cenar... Pero
tampoco os quiero deprimir. Únicamente puntualizar que con esto no
quiero decir que no esté de acuerdo con las propuestas de IKEA de cenar
en familia o de
integrar actividades educativas en el contexto de la actividad familiar, algo que me parece fantástico y de lo más recomendable, ojo.
Así que, IKEA, las ideas para que el hogar contribuya de forma
positiva (sumando y no restando) al desarrollo académico de niños y
niñas y a la adquisición de competencias bienvenidas son, pero
no nos digas a los profesores y profesoras de España cómo tenemos que hacer nuestro trabajo,
igual que nosotros no te decimos a ti como preparar tus albóndigas
suecas, porque damos por sentado que eres tú quién las sabe cocinar
mejor.
Fuente: Raquel en
bebesymas